14 de noviembre de 2010

Hijos diferentes, necesidades diferentes

¿Debemos promover cuidados basados en las características de los bebés o tratar de enseñarles desde fuera un conjunto de reglas y disciplinas?

Pienso que se trata de una pregunta que simplemente necesita matización, pues no creo que ambas opciones sean excluyentes. Los padres, sin ni siquiera darse cuenta, enseñan un conjunto de reglas y disciplinas que ellos creen las adecuadas, pero siempre se basan en las características del bebé y adaptan sus normas dependiendo de los resultados que obtengan y de los comportamientos que tenga la criatura.

Por ejemplo: unos padres acaban de tener mellizos y piensan que lo ideal es adaptarse a sus características y ser, en gran medida, permisivos sin ejercer demasiada presión a la hora de darle la comida, tal y como vieron en el siguiente video:
Con una de las criaturas no tienen ningún problema porque han visto que si le dejan que él tome las riendas, poco a poco él come de todo y de manera saludable. Sin embargo, con su segundo hermano no ocurre lo mismo, sino que se niega a comer papilla y verduras y sólo acepta chucherías y alimentos no considerados apropiados para su crecimiento. Es entonces cuando los padres se ven obligados a ser menos permisivos con este último que con el primero ya que muchas veces tendrán más “peleillas” a la hora de darle de comer que con el primero al cual sí le funciona esa estrategia. Y lo mismo pasa cuando ya son mayores. Puede que uno sea obediente si se razonan con él las normas y con el otro sea una misión imposible y los padres acaben usando el “porque yo lo digo”.

Por lo tanto, es probable que los padres no sean conscientes (o simplemente no quieran admitirlo) de que las normas que dan a sus hijos no son las mismas y no actúan de la misma manera con unos y con otros porque simplemente a lo que a uno le viene bien, a otro puede venirle fatal. Por eso es necesario establecer normas y disciplinas que sean efectivas y éstas lo serán si se tiene conocimiento del propio hijo.

1 comentario:

Galeth dijo...

Yo esto lo he vivido en primera persona y la verdad influyen muchos factores a la hora de ponerle normas a los hijos, en mi tengo dos hermanas que en realidad son hermanastras y siempre hemos vivido juntos, yo era el primer hijo de mi padre y el tercero de mi madre y me sobreprotegieron muchísimo y me dieron menos permisos hasta cierta edad que empece a reclamar mi espacio, a partir de ahi tuve mas libertades de las que disfrutaban mis hermanas.